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Cómo monitorear actividades maliciosas que puedan afectar a su empresa

Escrito por Equipo de Contenido | 16-jun-2025 11:59:37

Las estrategias de ciberseguridad corporativa han evolucionado significativamente en la última década. Firewalls, EDRs, SIEMs y otras soluciones de defensa perimetral e interna se han convertido en estándares para las empresas que toman en serio la seguridad de la información. Aun así, los incidentes persisten y, en muchos casos, aumentan en sofisticación e impacto.

La razón es simple pero frecuentemente ignorada: la mayoría de los vectores de ataque que generan incidentes reales hoy no están dentro de la red. Están afuera.

Para proteger eficazmente una organización, no basta con observar lo que ocurre dentro del perímetro corporativo. Es esencial mapear, monitorear y comprender el ecosistema externo: dominios, redes, comunidades y servicios que pueden utilizarse para preparar y lanzar ataques contra la empresa, incluso sin vulnerabilidades internas.

En este artículo exploraremos en profundidad:

  • Qué caracteriza a la ciberseguridad externa y por qué es crítica

  • Tipos de señales externas que preceden ataques reales

  • Las limitaciones de las herramientas tradicionales

  • La nueva superficie de ataque digital y cómo debe ser monitoreada

Nuestro objetivo es claro: evidenciar con precisión qué debe comprenderse y vigilarse para reducir riesgos reales. 

 

¿Qué es la ciberseguridad externa?

La ciberseguridad externa se refiere a la protección de la organización frente a amenazas originadas fuera de su perímetro técnico directo. Esto incluye cualquier vector externo a la red interna, como:

  • Infraestructuras fraudulentas diseñadas para engañar a empleados o clientes

  • Filtraciones de datos corporativos en entornos públicos o semiprivados

  • Menciones a la organización o sus activos en foros clandestinos

  • Campañas de phishing y ataques de ingeniería social ejecutados por terceros

  • Actividades automatizadas o manuales orientadas al reconocimiento o explotación externa

A diferencia de la seguridad tradicional, enfocada en endpoints, firewalls, tráfico interno y credenciales protegidas, la ciberseguridad externa requiere vigilancia continua de un ecosistema volátil, descentralizado y, muchas veces, anónimo.

La paradoja del perímetro

La transformación digital ha descentralizado los puntos de contacto entre una organización y el entorno externo. Con la migración a SaaS, la exposición en redes sociales, la tercerización de servicios y la expansión de la presencia digital, el perímetro tradicional —donde las herramientas de seguridad están instaladas— se ha vuelto insuficiente.

Hoy, una campaña de phishing exitosa puede comenzar con un dominio falso, continuar con una página clonada hospedada en un servicio gratuito y terminar con la recolección de credenciales de un empleado remoto, sin que ninguna herramienta de protección interna detecte actividad anómala.

El ciclo de la amenaza: de la preparación al ataque Los ataques no nacen en el momento del impacto. Pasan por un ciclo de preparación, ejecución y, muchas veces, expansión. Comprender las señales de este ciclo es clave para anticipar y prevenir incidentes.

 

Fase 1: Reconocimiento

El atacante recopila información sobre la organización objetivo. Esto puede incluir:

  • Descubrimiento de subdominios y servicios expuestos

  • Mapeo de proveedores SaaS utilizados

  • Búsqueda de credenciales filtradas anteriormente

  • Identificación de empleados, ejecutivos y sus comportamientos digitales

Las fuentes incluyen sitios públicos, LinkedIn, pastebins, motores de búsqueda alternativos y repositorios de código abiertos.

 

Fase 2: Preparación de infraestructura

Con la información recolectada, el atacante crea activos externos para simular, engañar o explotar:

  • Dominios con variantes de la marca o nombres engañosos (typosquatting, homográficos)

  • Páginas falsas hospedadas en buckets en la nube o CDNs gratuitas

  • Configuración de SMTPs para enviar correos falsificados (spoofed)

  • Creación de cuentas falsas en redes sociales para suplantar identidades

Estos recursos suelen diseñarse para operar solo por pocas horas, eludiendo detección.

 

Fase 3: Ejecución de la campaña

El ataque se lleva a cabo:

  • Envio masivo o dirigido de correos de phishing con enlaces externos

  • Promoción de anuncios maliciosos con redireccionamiento selectivo

  • Difusión de enlaces en canales como Telegram, WhatsApp o foros

  • Explotación de brechas mediante credenciales o configuraciones previamente identificadas

 

Fase 4: Monetización o persistencia

Según el objetivo, los atacantes pueden:

  • Vender credenciales, accesos o información en marketplaces

  • Usar el acceso para movimientos laterales en otras redes

  • Extorsionar datos confidenciales (ransomware o doble extorsión)

  • Ejecutar nuevas campañas con la infraestructura reaprovechada

Detectar señales en las fases 1 y 2 permite anticiparse y bloquear ataques antes de que se materialicen.

Ejemplos reales de señales externas

Tipo de actividad

Señal observada

Registro de dominios engañosos

Variaciones del nombre de marca con fines de phishing

Actividad en foros de ciberdelito

Discusiones sobre sistemas internos, CVEs y venta de credenciales

Filtración de datos

Dumps con contraseñas corporativas en servicios públicos o pagos

Infraestructura de phishing

Páginas clonadas alojadas en buckets en la nube

Ingeniería social a escala

Perfiles falsos que suplantan ejecutivos con enlaces maliciosos

Activación de SMTPs maliciosos

Dominios recién configurados para enviar emails falsificados

En la mayoría de los casos, estas señales emergen entre 6 y 72 horas antes de la ejecución. En ataques dirigidos (como spear phishing o BEC), la ventana puede ser menor.

Por qué las herramientas tradicionales no bastan

La mayoría de las soluciones utilizadas hoy fueron diseñadas para proteger entornos controlados: endpoints, tráfico interno, servidores gestionados y correos corporativos.

Lo que no detectan:

  • Dominios recién creados que aún no han sido utilizados en ataques conocidos

  • Contenido en foros de acceso restringido que bloquean crawlers

  • Sitios maliciosos con evasión activa mediante fingerprinting

  • Campañas distribuidas replicadas en múltiples infraestructuras

Incluso soluciones con threat intelligence convencional fallan si dependen de listas o feeds externos — que solo reaccionan post-incidente.

El falso sentido de protección Empresas que invirtieron en EDRs, firewalls avanzados, CASB o DLP pueden creer que están protegidas. Pero si estas soluciones no monitorean la superficie externa, están ciegas ante lo que viene.

Esa brecha estratégica abre la puerta a ataques que permanecen invisibles hasta que ya es demasiado tarde.

La nueva superficie de ataque digital

Hoy, la superficie de ataque de una empresa incluye todos los puntos de contacto digitales, incluso aquellos fuera de su control directo:

  • Dominios y subdominios falsos usados para fraude o phishing

  • Redes sociales y plataformas de mensajería con suplantaciones de identidad

  • Foros, canales y marketplaces donde se negocian accesos y vulnerabilidades

  • Servicios de paste y archivos indexados públicos que pueden filtrar información sensible

  • Infraestructura en la nube mal configurada o efímera (buckets abiertos, redirectores, etc.)

Técnicas modernas de evasión:

  • Fingerprinting: sitios que muestran contenido diferente según user-agent, IP o resolución

  • Geofencing: contenido malicioso visible solo desde ciertos países o redes

  • Short-lived infra: dominios/servidores activos solo por horas para evitar listas negras

  • Campañas fragmentadas: ataques replicados con pequeñas variaciones

Estas técnicas exigen detección proactiva e inteligencia contextual.

La visibilidad externa es requisito para una defensa real

Para responder a la pregunta "¿Cómo monitorear actividades maliciosas que puedan afectar a su empresa?", la respuesta técnica es clara: se debe monitorear el entorno externo con herramientas especializadas en inteligencia de amenazas, detección avanzada y automatización de respuesta.

La Axur ofrece esta visibilidad mediante un conjunto coordinado de capacidades que cubren las brechas que las soluciones tradicionales no alcanzan, y que están diseñadas para anticipar, no solo reaccionar:

  • Monitoreo a gran escala y alcance global
    Nuestra plataforma observa continuamente decenas de millones de activos digitales, incluidos dominios recién registrados, buckets abiertos en la nube, marketplaces de credenciales, foros cerrados, redes sociales y canales alternativos. Este monitoreo va más allá del simple crawling: implica enriquecimiento técnico, análisis contextual y priorización por nivel de riesgo.

  • Detección por IA sin dependencia de palabras clave
    Axur aplica modelos propios de IA generativa y redes neuronales entrenadas para identificar amenazas a partir de patrones visuales, estructurales y funcionales, incluso cuando el atacante evita mencionar la marca. Esto permite detectar sitios de phishing y clones maliciosos incluso en campañas altamente evasivas.

  • Flujos automáticos de respuesta y takedown
    Cuando se identifica una amenaza, la respuesta no depende de revisión manual. La plataforma genera alertas con evidencia técnica accionable y activa procesos automáticos de eliminación con ISPs, proveedores de hosting y listas negras. Esto incluye integraciones con SIEM, SOAR o sistemas de tickets internos, reduciendo el tiempo de mitigación de horas a minutos.

Proteger su organización hoy exige más que visibilidad interna. Si su equipo busca anticipar riesgos con inteligencia real sobre el entorno externo de amenazas, póngase en contacto con Axur. Estamos listos para apoyar su estrategia de defensa con profundidad, escala y precisión.